Las casualidades de la vida hicieron que Isa, residente en León y Herón, residente en Cartagena, fueran a conocerse en un viaje por separado que realizaron a Punta Cana. Ahí empezó su bonita historia, y como fue en la playa donde se conocieron, desearon casarse en una playa, en este caso en Murcia, en La Manga del Mar Menor.
Una boda muy especial, recordando en todo momento grandes ausencias, cargada de momentos muy emotivos, y otros también muy divertidos. Con sorpresas tanto para invitados como para los novios. Una boda que disfruté como una más pero de verdad, en toda regla. Una boda que jamás olvidaré y de la que me queda un maravilloso recuerdo. Y ahora, una vez más, me une algo especial con los que simplemente empezaron siendo “mis novios” .
Agradecida de poder compartir este momento con vosotros. Solo espero que las imágenes que os entregué, formen un recuerdo que perdure para siempre en vuestra historia.
Un abrazo y hasta pronto amigos!