Que una pareja te escriba desde otra provincia, en este caso Madrid y te escoja a ti, teniendo tantos y tantos fotógrafos entre los que elegír aquí y allí, es todo un privilegio.
Todavía recuerdo el primer mensaje de Sara pero aún recuerdo más el mensaje definitivo en el que me confirmaban que querían que fuera yo la encargada de inmortalizar su día. Es todo un privilegio que una pareja te escoja y es una sensación increíble cada vez que se produce.
El lugar escogido en esta ocasión fue el Jardín Botánico de Gijón, un lugar que encaja perfectamente con ellos y con sus estudios. Al final, todo encaja, de una manera o de otra, todo encaja. Una casualidad cuando se lo propuse y les encantó la idea.
La preboda es una ocasión perfecta para conocernos más y para sentirnos más cómodos el día de la boda. En este caso, conocí a una pareja encantadora, a una novia superilusionada y nerviosa por su gran día, y un novio que la trata con toda la ternura del mundo. Disfruto como una enana cuando me regalan gestos tan bonitos y tiernos.
Espero que disfrutéis con el resumen de se preboda!!